Sobre la muerte.

Jamás había visitado una funeraria; jamás.

Hace dos días una hermana de mi abuela, madre de mi mamá, acaba de fallecer
nunca, pensé que ser cercano pudiera hacer a mi madre viajar desde aquí
hasta el pequeño rancho donde falleció. A mi, no me conmociono en lo más minimo, ya que no estaba familiarizado con su nombre, nomás escuchaba, tu tía Carmén esto, que tu tía Carmén falleció por toser fuerte y algo revento entre sus viceras.

Pero me hace tanto reflexionar, la posición que tiene la muerte entre nosotros,
que pienso es lo mismo que la vida, cuando mueres miles de bacterías siguen el proceso de putrefacción, pero siguen trabajando
como máquinas sin pensamiento, que retornas al polvo, a la tierra,que no eres de nadie ni nada, que la muerte como todo
es otro estado vital, no me pregunto lo que hay despues, porque no hay nada, solo más vida.

Es el trance macabro/hermoso que se diferencia de la monotonía vital, que las personas
no están familiarizadas y temen de la muerte. ¿Por qué lloran, por qué sus lágrimas?
porque todo cuando ya estás muerto, todos te lloran, porque no te sonríen cuando estás vivo.
Odio esa estupidez de llorar por algún muerto, la única cosa que puedes decir es que está en una mejor situación
de la que estaba, se allá en la nulidad, ese maravilloso estado de lo posible/imposible.

¿Y que hay de esas muertes en vida?
Aquéllas que sin querer morirte, tiendes a hacerlo por las simplicidad de una vida sin sentido, una vida sin nada.

La muerte puede representar algo, para mi es la vida que viene.